El bulldog es una raza de perro, de pequeño tamaño, que se originó en Inglaterra, y que fue establecido con el fin de diversa clase. Pero, los países que más importancia tuvieron en el desarrollo de dicha raza han sido Gran Bretaña y América. También, reciben el nombre de payaso o de “buey de ranas”. Su origen se remonta a la década de 1850. Y, sus inicios, están en Inglaterra. El perro más cercano al mismo es el bulldog inglés, que era descendiente de algunas razas del tip mastiff. Pero, como todos los dogos, su origen está en los molosos de la región de Europa, en tierras griegas y en el Imperio Romano. En el resultado del cruce de varias razas, entre ellas, la toy bulldogs, que venían de Gran Bretaña, con perros locales y descendientes de los mismos. Al mismo tiempo, descienden de los dogos frances y del bull dog inglés… que es mucho más pesado. Y, es que los criadores buscaban una raza perfecta para los combates de perros, o sea, una raza ágil y muy atlética; hecho que tuvo lugar en París, desde el s. XIX.
Por otro lado, la alta sociedad se enamoró de estos perros, por su característica gracia y por su gran carácter, que hizo que se hiciera más popular todavía. En un primer momento, la mayor parte de sus propietarios eran carniceros y cocheros; pero, después, es cuando la alta sociedad se fija en ellos y, por los artistas. Es un perro muy sociable, juguetón, alegre, que es excelente con los niños y con otras mascotas con las que es muy protector, sobre todo, con las hembras.
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