Esta es la impresionante historia de Motola, una hembra de elefante, que en 1999 perdió un pie y parte de su pata izquierda delantera, a causa de una mina, y que 10 años más tarde recibió la oportunidad de volver a caminar.
El hecho sucedió en Tailandia, más precisamente en un campo cercano a la frontera con Birmania. Esa zona esconde bajo su suelo, una infinidad de minas explosivas, que datan de la época del comienzo de la guerra civil de ese lugar (hace medio siglo atrás).
Motola, una hembra de elefante, adulta (de alrededor de 50 años), era empleada para remover y desplazar árboles. Su dueño la dejaba libre en algunos momentos para que ella recorriese el bosque en busca de alimento. Fue allí cuando la inocente elefanta pisó una de las tantas minas subterráneas y resultó seriamente herida.
Pese a los cuidados dados en el Hospital de elefantes, su parta debió ser amputada dado el estado de gravedad en que se encontraba.
Luego de intensos tratamientos de rehabilitación, como por ejemplo la utilización durante tres años de un aparato temporal que le permitiese volver a ganar musculatura y fuerza, se sometió a Motola a una intervención quirúrgica que cambió su destino: la colocación de una prótesis permanente. Dicha prótesis fue diseñada y construida por la Fundación Prótesis, que también fabrica prótesis para personas.
La operación fue llevada a cabo el 16 de agosto del 2009 con excelentes resultados. Los primeros pasos de Motola con su pierna artificial quedaron impresos en la memoria de todos: ella caminó unos metros, tomó arena con la trompa y la lanzó al aire en señal de festejo.
Cabe destacar que el hospital donde fue atendida Motola, es el primer hospital de elefantes en todo el mundo. Este hospital, fundado en 1993 por Soraida Salwala y la sociedad “the Friends of the Asian Elephant”, atiende las distintas afecciones de estas hermosas criaturas, tanto las causadas por la naturaleza (como enfermedades), como las que les provocan los hombres.
Comentarios de Soraida:
“Ha ido bien, ya ha salido a andar dos veces. Aún no se ha atrevido a poner todo su peso en esa pierna pero se encuentra bien”.
Curiosidad: La operación figura en el libro Guiness de los Records porque se utilizó una cantidad de anestésico tal, como para dejar inconscientes a 70 personas.
Foto: flickr
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